martes, 27 de octubre de 2015

El recuerdo de nuestros pequeños


                                          


  Sentada frente a mi ordenador, siento que estoy haciendo algo que necesito.
  Aún es octubre, un mes dedicado al recuerdo de los hijos perdidos durante la gestación, en su nacimiento o tras éste.

  Mi vida en un país de habla alemana, Suiza, me ha traído el mayor de los regalos, mi hija Sara, nuestra amada y deseadísima hija, la que llegó a nuestros brazos el pasado año.
  ¿Para qué esta entrada?. Necesito expresar a todas aquellas mamis y papis que me han seguido en mi blog, que el nacimiento de nuestra pequeña, no hizo que haya olvidado a mis bebés, mis queridos hijos que perdí, ni el hecho de no haber escrito todo este tiempo en este blog.
Sin embargo, el pasado año,  cuando fui de visita a España, en octubre, no pude asistir a un evento que en la localidad de Alicante, en recuerdo de estos pequeños hijos perdidos. El momento que vivía no me lo permitía, sentía que necesitaba celebrar la nueva vida, y aún sentía miedo de recordar las muertes de mis pequeños, de forma tan intensa, en un evento como aquél, tras años de dolorosos duelos.
 Hoy, por fin, puedo afrontar este momento, y deciros, comunicaros, que siento vuestras pérdidas, que lo siento de corazón, y quiero acompañaros en este momento, en que me lees, me leéis. Y también de forma muy sentida, me alegro de que hoy sí pueda ser, de poder afrontar este momento tan importante y decisivo para mí. No me he olvidado de vosotros, a pesar de que mi ausencia en estas páginas así pueda hacerlo creer.

 Etapa tras etapa, empiezo a sentirme de nuevo preparada, para acompañaros, a través de estas páginas, queridas mamis, papis, amigos, familiares de personas que tenéis un ser querido que ha perdido a su/s hijo/s y estáis viviendo un duelo o queréis acompañar a otra persona que está viviéndolo.
  Os envío un abrazo muy sentido,  mi recuerdo para vosotros y especialmente para vuestros pequeños.

5 comentarios:

  1. Cuesta mucho decir algo para consolar...es tan fácil caer en frases hechas má si uno no paso por esa experiencia tan triste que te toco vivir para la que sinceramente,no hay respuesta. Perdí muchos seres queridos en estos tres años, mi padre, 2 tios, 2 primos, 2 cuñados pero ningún niño, eso sí ya no lo podría tolerar por que me ha costado mucho superar y la vida cambia indefectiblemente. No tengo hijos pero sí sobrinos y me pongo en tu lugar y el de tantas madres, trato de hacerlo de forma sincera para sentir al menos algo de lo que han sentido, cuesta mucho, es todo un esfuerzo y trabajo pero se logra...un abrazo Mar, todo mi apoyo y cariño.


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  2. Hola Mar, te comenté en los dos blogs..será que te llegaron los comentarios? porque los busco y no los encuentro o tal vez no aprobaste..cada vez entiendo menos esta cuestión..te decia que no es fácil ponerse en la piel del otro y las palabras de consuelo suenan a frases hechas, pero hago lo posible para entender tu dolor y el de tantas madres, se mucho sobre pérdidas y sobre el deseo de ser madre...se lo que cuesta seguir adelante, un abrazo amiga.


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  3. Querida Carmen:

    En ocasiones no es nada fácil entender el dolor de una madre, un padre, que ha perdido a su hijo, cuándo no ha habido la presencia física de éste. A veces los mismos padres del bebé fallecido lo viven de distinta forma, como dos personas diferentes que son, y que sienten cada uno a su modo ésta pérdida (y otras previas).

    Una misma persona, por ejemplo una madre o un padre, que ha perdido a su hijo, no vive esta pérdida como otras previas, aunque su historias anteriores de duelo puedan influir en éste, sufrido por la vivencia de sentir morir a su/s hijos durante la gestación, el parto o tras éste.

    Cada padre y cada madre necesita un tipo de ayuda cuándo ha perdido un bebé, pero lo que también es cierto, es que la sensibilidad de la familia, como de los profesionales, siempre ayuda mucho a estos progenitores, que se han quedado con sus bracitos vacíos (sin su deseado hijo al que poder abrazar) y su corazón muy dolorido, tras ver marchar la que hasta entonces seguramente fue la mayor de sus alegrías, la llegada de su esperado hijo.

    Tu trato sensible a estas familias, les aportará un gran apoyo, del que muy posiblemente estarán necesitados.

    Sobre lo que me decías de que a veces te suena a frases hechas, quiero decirte que un sincero "lo siento", expresado a los padres desde el corazón, ya es mucho para estos padres que sufren, porque su amado hijo ha muerto (algo que no se nombra muchas veces, usando palabras sustitutas , tabúes, pues a veces "necesitamos" no nombrar en voz alta aquello que tanto nos duele, o porque creemos que así "somos más respetuosos" con los padres).

    Te adjunto el enlace de dos artículos que me gustaron mucho, muy sincero, uno hablando sobre una pérdida añadida, la de la pareja, tras una gran transformación en su relación, al sufrir la muerte de su hijo, en la fase gestacional, y el otro nombrando el dolor de una madre que no se siente reconocida como tal, reflexionando sobre su proceso vivido, desde una fase más avanzada de su duelo(habiendo podido elaborar su/s pérdidas) . Quizás leerlo pueda ayudarte a ponerte en su piel. Su título es "¡Mi piel grita que soy madre! ":

    http://miraralcielo.net/2013/05/05/mi-piel-grita-que-soy-madre/

    http://yoteesperabayoteespero.blogspot.ch/2015/10/separarte-de-tu-pareja-luego-de-perder.html


    También hay un artículo, de los más leídos en estas páginas sobre Psicología Perinatal, que titulé “Consolar a quién pierde un hijo durante su gestación”. Hablo sobre esta dificultad que en ocasiones encuentran las personas que nos quieren, deseosas de acompañarnos, como amigos o familiares, pero que no saben cómo hacerlo, y buscan el modo de estar a nuestro lado, sin dañarnos. Quizás te guste su lectura. Éste es el enlace al mismo:

    http://gestaltmarpsicologiaperinatal.blogspot.ch/2013/02/perder-un-hijo.html

    Un sentido abrazo, querida amiga, y mi agradecimiento por buscar ponerte en la perspectiva de estos padres, no ya como profesional, sino como persona que eres, buscando comprenderlos, aunque como bien dices, en ocasiones no sea nada fácil para quién no lo ha vivido. Espero, con sinceridad, que estos tres años hayas tenido un sentido y auténtico acompañamiento de aquellas personas relevantes para ti en tu vida, pues en ocasiones es el único consuelo que nos queda, a quiénes, lamentablemente hemos vivido pérdida tras pérdida, de nuestros seres amados, y la más grande ayuda que podemos recibir, para seguir afrontando la vida, como dices, totalmente cambiados, de corazón te lo digo. Besos, muy cercanos y sentidos para ti, Carmen.

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  4. Gracias por tus palabras Mar y mil gracias por los enlaces, los voy a aprovechar mucho. He publicado algo tuyo sin consultarte ya que me pareció importante difundirlo y me gustaría seguir tomando algunas entradas de tu blog si me lo permites...de antemano gracias. Seguimos en contacto, abrazos sinceros

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  5. Querida Carmen:
    Gracias por tu labor de difusión de aquellos artículos de este blog (o de mi otro blog) que consideres puedan servir de ayuda su lectura. Sólo te agradecería que si añadas el enlace directo al artículo, para que pueda ser conocida su autoría, leído por completo, por aquellas personas que puedan estar interesados en ese tema, así como para que conozcan el origen de éste (del blog en el que se publica), o quizás conocer otros artículos que haya publicado.
    Gracias a ti, por tu forma tan afectuosa de seguirme siempre, sea en estas páginas o en mi otro blog.
    Las palabras que te dirijo son salidas totalmente de mi corazón, y sentidas, por la relación, que aunque sea por estos medios, hemos creado entre ambas.
    Un abrazo muy sentido, amiga.

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